El vestidor es un lugar exclusivamente pensado para almacenar la ropa, zapatos, bolsos y demás complementos y accesorios. Diseñando el vestidor personalizadamente conseguirás ofrecer una imagen de equilibrio, orden y funcionalidad porque podrás elegir a simple vista la combinación que necesitas.
Opciones prácticas y decorativas
Para espacios grandes:
Si cuentas con un espacio suficiente y amplio, puedes reservar una zona como área de tocador. Pues optar por combinar varios módulos de armarios con otros armarios como una cajonera o zapatero que puedes personalizar tú mismo. Así dispondrás de espacio extra y podrás distribuir prendas y complementos en dos muebles independientes.
Para espacios medianos:
Si quieres diseñar un vestidor en tu habitación, pero sin obras puedes decantarte por varios armarios y colocarlos en forma de L. De este modo crearás un armario completo en ángulo que te permitirá disfrutar de un espacio íntimo, más reservado y amplio para almacenar tus enseres.
Para espacios mini, opción low cost:
Otra solución es crear un vestidor al estilo backstage de las pasarelas de moda o tiendas de grandes firmas de moda. Para conseguirlo, te recomendamos que utilices un perchero metalizado o armario sin puertas de modo que tengas todo a primera vista. Para lucir este vestidor es imprescindible que tengas todo el interior perfectamente ordenado.
En cualquier de los espacios puedes optar por hacer un vestidor sin puertas.
Entre sus ventajas destacan:
Permite economizar el espacio: no necesitas dejar un espacio extra delante del armario para poder abrir las puertas y acceder al interior.
Es una solución económica puesto que se prescinden de las puertas.
Es la propuesta más de moda: es una solución muy atractiva y moderna.
Permite ver a simple vista todo el interior del vestidor, haciendo más fácil la búsqueda de tus pertenencias.
Decora el interior
Elige las baldas y los cajones en un color diferente al de los módulos, una combinación muy vistosa en los vestidores para jugar con diferentes acabados.